Anécdotas Graciosas – Ladrona de sistemas

El trabajo de programador requiere mucha esfuerzo intelectual. Tal vez esa sea la razón por la cual solo unos cuantos de mis ex-compañeros de la universidad se dedican a este oficio.
Me ha sucedido que mis alumnos son mas creativos a la hora de copiar. En vez de hacer el trabajo por si mismos, se las ingenian y consiguen que alguien les venda el trabajo ya hecho; al cual le cambian colores, tamaños, fuentes, le ponen imagenes, etc. Incluso yo me he dedicado muchas veces a vender proyectos, aún sabiendo que serán utilizados para presentarlos como trabajo final en alguna materia.

Hace ya varios años, en uno de mis primeros empleos, sucedió un caso que, cuando lo recuerdo, me da pena ajena.
Sucede que había una mujer que presumía un proyecto hecho por otro de mis compañeros. Asístía a reuniones y lo presentaba como suyo. Cuando se le preguntaba si ella lo había hecho, aseguraba con tanta credibilidad ser la autora; así como un niño dice "Yo no me comí el chocolate" mientras tiene los labios manchados.
Mi compañero estaba indignado, así que con mucha astucia se las ingenió para descubrirla.

Conclusión


No robes el trabajo de otro programador.

¡Somos muy inteligentes y puedes tener muchos problemas!


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